A propósito del tiempo

Muchos dicen que soy una muy buena persona, que río mucho, que soy desenfadada, loca, con un gran corazón de pollo y que a veces me lastiman por ser madre inconciente de la caridad para fines ajenos; sin embargo, creo que soy como cualquier ser humano que ha aprendido a punta de golpes, sopapos, traiciones, verdades dolorosas, mentiras arraigadas, habladurías sin sentido y falsas muestras de cariño, y aunque siempre se menciona primero lo doloroso, también soy resultado de un gran menjurje amoroso de personas que quizá se pudieron ahorrar el esfuerzo pero que decidieron arriesgarse como los grandes para moldearme, incluso batallando con mi raciocinio falto de experiencia.

Pero, vamos, que a propósito del tiempo, me he dado cuenta que experimentos exitosos como el que hicieron conmigo hay por todos lados, personas casi contadas, que podrían pasar desapercibidas,  y que aguardan el momento correcto para cerciorarse de no vamos tan mal por esta vida, pues disfrutamos de un buen café, quizá un cigarrillo, que valoramos un libro con empastado antiguo, que podemos ver una pintura sin tener la necesidad de ver la firma para verla fea o bonita, aquellos quienes nos emociona un viaje, disfrutamos una canción de dolor riendo con algunos amigos, y detestamos la injusticia, casi hasta el grado de ser llamados locos, patéticos y urgidos de amor.

¡Vaya!, que somos humanos como cualquier otro, pero concientes de que queremos comernos al mundo, no de una mordida, sino disfrutarlo despacito, saboreando cada bocado de triunfo y de fracaso, y ¿por qué no? saboreando un "lo sabía" "te lo dije" "yo te lo advertí" etc. Y es que esas frases, fuera de ser un cuchillito de palo, representan una forma recordar y querer hacer entender a otros, nuestras grandes enseñanzares en la vida que quizá un día comenzaron como un error.

Pero les decía, que a propósito del tiempo, no saben cuanto he disfrutado, de ver como éste me ha dado la razón en algunas cosas, tanto, que me siento la mamá de los pollitos (cabe decir que sólo un rato, por que eso de ser alzada y sentirme hecha a mano, no se me da mucho). He visto a mucha gente seguir y sentirme al menos parte de su camino y también creer que no fui un obstáculo más, si no un letrero con una flecha grande de esos que entiendes como "siga de frente, va por el camino correcto". Pero soy demasiado humana, claro es que no podemos hablar de esta concepción sin el toque de maldad, que TODOS llevamos dentro, ¡Y si eh!

Últimamene parece que el tiempo me hace justicia, y el hígado me reclama por hacer corajes de antaño y sin sentido, y el llevarse la paga, las cosas están tan sospechosamente a la medida que pensé, que pareciera que es un espejismo dentro del desierto, sin embargo, me doy cuenta, que sí, maldosa y todo lo que quieran, pero jamás mala amiga, nunca malagradecida y mucho menos le deseo mal a los demás... Pero como les decía, no soy extraterrestre y disfruto un poquito, de ver que mis detractores son víctimas de la mala tirada que llevó a esta ruleta rusa a dejarme un buen rato arriba y ni modo, allá abajo ya me tocó, y antes de hacerme un delicioso taco de mis palabras, para comérmelo hasta sin hambre, mejor disfruto, que a eso vine y fue lo primero que aprendí en casa.

Tan - Tan