Nostalgias precipitadas

De las nostalgias precipitadas quiero contarte...

No quiero perderte cuando aún ni te conozco, no quiero perderme cuando aún ni cierro los ojos. Empiezo a volar temerosa, viendo al frente sin voltear abajo pues la altura no debe dominarme.

Las alas quizá están rotas, las musas quizá ausentes, mis letras no se han borrado sólo se ausentan, cuando mi alma calla, cuando a ella le duele. El reloj marca ya la madrugada, largas noches y eternas las horas que no me dejan dormir, que me obligan a estar bajo de esta luna, si la de octubre, la más hermosa, la más luminosa, la más intensa, la más nostálgica.

Y me pregunto, ¿Nostalgia de qué?, ni mi memoria responde, puede ser de tus ojos, puede ser del calor de tus manos; Pero ahora mismo lo desconozco, ya no recuerdo ni tu cara, ni tu nombre, ya te veo en cualquier rostro, ya encuentro la imitación de tu calor en otras manos.

Y es este maldito temor a amar, a entregar y a dejarme volar, mientras te veo a lo lejos, partiendo plaza con triunfos, y yo con mis agravios, queriendo encontrar respuestas, en dónde quizá ya ni cabe la pregunta.

Y también de lejos lo veo a él, quien siempre me imaginé, a quien tengo miedo de seducir, pues no encuentro armas consistentes... Me veo a mí aquí, haciendo de la noche mi guía de vida, tras el silencio que oculta mi melancolía, con la oscuridad a cuestas... donde no te veo, ni me ves.

Él me dió un paseo por el universo, me llevó a volar algo lejos, en una sola noche, en un sólo momento me mostró otro paraíso donde no se ataban las manos, ni se cortaban las alas, donde cada quien volaba a su paso, donde no te dejaban caer en el primer intento y no te soltaba la mano quien te llevaba a pasear. Sí, está lejos, ya muchas lunas sin ver sus ojos, sin tocar sus hombros y su cabello largo no roza mi pecho.

No ha habido una sóla luna en la que él no pasee de repente, y tu te vas difuminando, pero me dejas el miedo tatuado, las ansias amarradas a mi ser, me dejas la inseguridad, las alas rotas, el semblante cabisbajo, he creido superarte y triste me doy cuenta que apenas lo estoy asimilando...

Así es como lo soñé, tal cual como vi en mi ilusión, él es quien debe de estar aquí y tu ya no... Y si no es él, de todos modos decreto que hoy te destierro de mi corazón para siempre, hoy levanto mi cara... y hasta puedo sonreirte... sólo para decirte adiós.

1 comentarios:

Pily dijo...

Hola nena ... que lidno esta esto ...

Yo tambien lo extraño ... que hermoso es todo eso ... ya veras que algo asi nos llega algun dia ... jeje ... espero no se tarde ese dia no???

Te quiero mucho mi niña ... besos ya brazos te extrañoooo !!!