Sorprendente...

Y es que no hay fecha importante en la que no se desee un buen sabor de boca, no hay circunstancia mejor, que la inesperada calidez de unas palabras provocativas.

Aùn no pasa el aroma, se ha quedado en la cama, mientras la ventana anuncia una nueva mañana, como aquella que visitaste mi burbuja que quiso detener el tiempo. No lo esperaba, me tomò por sopresa, quise hacer tanto y me faltò tiempo, nos sobrò el reloj ese que desbarata los momentos màgicos, cuando anuncia que el momento de partir ha llegado.

Buena tàctica, te felicito, pudiste pasar desapercibido, hasta que fuiste inminente y te apareciste con tu semblante sin miedo ante, el embate de mis latidos a la par de tus ecos. Mil canciones nos fueron uniendo, no suponìa aquel encuentro...

Sigo viendo la cama, y aùn no me lo explico, no la usurpaste, sòlo la habitaste como hacìa mucho nadie, una noche antes no pudiera haberlo imaginado. No es tarde para decirte, que ha sido maravilloso, no tengo miedo de sonreir al recordar que ha sido màgico, seguro te lanzarè una mirada retadora, cuando tenga ganas de abrazarte y seguir siendo còmplices de esta locura, que me encantò.

Hoy no hay dudas, no hay incertidumbre, mi mente feliz reposa sin telarañas mentales, no se hasta donde llegues, no se si te quedaste, no entiendo cuando estaràs de nuevo. Pero algo me queda claro, los momentos inesperados, con finales tan excèntricos, un abrazo, la caricia, tus labios, nuestra respiraciòn en los oidos del otro, me ha dejado marcada tu mirada, deseando tus manos otra vez cerca, ahogando las penas en un vaso de agua, que a tragos me bebì, el dìa que apareciste e inexplicablemente me sonreìste...

Quiero interpretar, de tu cuerpo puedo hacer una canciòn, de tus manos construir el mundo, de tu cabello cobijar mis ansias, de tu color de piel, dar vida al panorama gris, te quiero volver a encontrar, si es efìmero, que lo sea, si es pasajero, que pase, pero que pase una vez màs, para invocar con frases la siguiente y quizà otra màs.