Volar....

Quiero volar .... ¿me acompañas?

Es una tarde como cualquier otra en la que veo tus ojos a través de tus pupilas que me indican que estás dormido, que no hay poder que te haga salir de tu ensueño. Me pregunto qué es lo que sueñas, con quien compartes ese espacio tan incierto en tu mente, por quién emites esos suspiros tan profundos.

Te observo por largos minutos, las eternidades de tu respiro y la timidez e inocencia de tu rostro, sin gestos abatido por la calma y el colapso de tu ser en el abismo de lo apasible, de lo desconocido.
Las lunas no han pasado en vano, el miedo quizá ha crecido pero la herida ya se parece cicatriz, toma forma de normalidad, el dolor cesa y la incertidumbre calma. No se cuantas mañanas deseé de nuevo estar acurrucada en tu costado, percibir tu aroma en mi cuerpo, impregnar de besos tu espalda cuando aún duermes y ver tus ojos cafés al despertar iluminando mi día.

Y hoy que he estado aquí, se que no hay más que el hoy que hemos vivido, que las huellas se irán borrando pero no la sensación, el perfume se irá esfumando pero no el ambiente.
Abrázame que hoy quiero volar muy alto, aprovechemos que hemos despertado en el mismo lecho, despeguemos de la mano y recorramos los instantes que queden de la energía que nuestros cuerpos atrajeron por la noche y anímate a vendarte los ojos y confiar en mi mano que no te suelta.

No sabemos si mañana los ojos se dejen de abrir, así que vivamos el hoy de la manera más intensa, de la forma más precisa y sin miedos.No tienes que temer, te aseguro no te lastimaría, te aseguro no desaprobaría, acompáñame a este vuelo, mientras dure.. y por el día, por la noche reposemos, para retomar el vuelo, sin perdernos el rastro y seguir nuestros aces de luz, hasta que el vuelo tenga que terminar....

Quiero volar... ¿me acompañas?